junio 30, 2006

El gas más caro, para ampliar la oferta local.

Publicado en La Nación.

Desde el 15 de julio próximo y hasta que termine el año, el gobierno argentino pagará por el gas boliviano un 60% más de lo que paga actualmente. Luego de esa fecha, habrá que ver. A cambio, Bolivia concederá a la Argentina la posibilidad de cuadruplicar las compras de gas durante los próximos 20 años.

El gas boliviano, que actualmente es el 5% del total del consumo local, es una de las herramientas a las que el Gobierno recurrió para remediar la escasez que produjo la poca inversión en exploración de gas, afectada por tarifas congeladas desde antes de la crisis.

Esas son las principales certezas que dejó el acuerdo que ayer firmaron los presidentes Néstor Kirchner y Evo Morales. Otra, que si bien no surge del acuerdo, pero que se puede inferir de los lineamientos del Gobierno, es que los mayores costos no serán trasladados a los usuarios residenciales.

Las indefiniciones, por ahora, se refieren al mercado interno. ¿Qué pasará con el combustible cuando ya circule por los gasoductos argentinos? ¿Quién pagará el mayor precio del gas que ingresará ahora?, eran las principales preguntas que se hacían ayer los empresarios del sector.

Actualmente, por el gas boliviano se pagan 3,50 dólares el millón de BTU (unidad térmica de medida), que luego se comercializa en el mercado interno a un valor que ronda 1,50 dólares. Por ahora, las empresas que se encargan de esa operación -Repsol YPF y Petrobras- manejan el negocio a pérdida y compensan con otros más redituables.

Ahora esa operación estará en manos de la estatal Enarsa. Será la empresa creada por iniciativa del Gobierno la que comercializará el combustible. Claro que para que pueda revender primero tiene que comprar, y para eso deberá tener con qué hacerlo. Dicho de otra forma, habrá que dotar de fondos a la empresa estatal para que compre el gas en la frontera.

Luego, sí tendrá que elegir entre venderlo al precio actual -1,50 US$- y soportar la pérdida, o asumir un rol empresarial y revender el gas con alguna ganancia. En este caso, tendrá que conseguir un comprador dispuesto a transar a ese precio.

Proveedor de largo plazo

El acuerdo no sólo fija un precio, sino que también amplía el volumen de compra. "Hay que tomarlo en forma positiva. La Argentina necesita comprar gas en cantidades adicionales a las actuales. Nos permite pensar en un gasoducto y clarifica bastante el futuro energético argentino. Bolivia será nuestra alternativa de abastecimiento", dijo el ex secretario de Energía Jorge Lapeña. El ex funcionario destacó, además, la posibilidad de proyectar, ahora sí, el postergado gasoducto del Nordeste, que planea construir Techint con alguna participación de Repsol YPF.

No todos lo ven igual: "Es el peor acuerdo que ha hecho la Argentina después que perdió la Banda Oriental. Se le transfieren a Bolivia alrededor de 400 millones de dólares sin justificación", dijo un consultor en energía.

Uno de los puntos que aún restan despejar es cuál será la fórmula que se utilizará para actualizar el precio del combustible. "La fórmula acordada deberá ser competitiva con el precio del combustible alternativo, como el fuel oil", dijo Lapeña.

El acuerdo, aun sin entrar en vigor, ya empezó a levantar críticas en las provincias gasíferas. Ayer volvieron a escucharse las posturas de Neuquén, principal productora de gas, y Salta. "La Argentina debe tener una política para hacer crecer su nivel de reservas, no sus niveles de exportación", dijo el gobernador de Salta, Juan Carlos Romero. Su colega neuquino, Jorge Sobisch, también se mostró descontento. "La decisión de importar gas a 4 o 5 dólares tendrá un impacto inevitable en los consumidores. Arrancar con 5 dólares es muy negativo para la economía", argumentó. El diputado y ex ministro de la provincia José Brillo dijo que es un acuerdo desfavorable para las cuencas nacionales. "¿Se imagina lo que puede pensar una productora local que recibe 1,50 dólares y ve que a Bolivia se le pagan 5?. Esto va en contra de las inversiones", sostuvo.

¿Tendrá garantizado el país gas boliviano por 20 años después del acuerdo? "La Argentina le prometió gas a Chile, y cuando faltó, se cansó de restringirle las exportaciones", contestó un analista.