setiembre 09, 2006

Nacionalización con pies de barro

Publicado en Los Tiempos.

Por:WINSTON ESTREMADOIRO

La clave de tanto desatino es que el padrino Chávez se ha aprovechado de un ingenuo ahijado boliviano, para torpedear su sector de hidrocarburos y ocupar el vacío resultante. Es un salvador de la patria que pronto hasta tropas militares nos mandará

Cuidado con los ídolos de pies de barro, advierte el precepto bíblico, porque carecen de base sólida y se caen con un aguacero. El gobierno de Evo Morales propulsó su ascensión y asienta su actual popularidad sobre dos: la postura contra la corrupción y nacionalizar los hidrocarburos.

Ha quedado claro que la primera es falsa deidad. Diputados que venden visas a chinos fantasmas y la alharaca de suspender a uno por abuso de influencia en provecho propio (no del partido), desnuda que el gobierno actual, como muchos anteriores, husmeó la marmaja que da la coyuntura del abuso del poder político. Lo prueba la arremetida contra el SNC, nido de ratas que costó varios años institucionalizar nombrando su director con un concurso de méritos. Hoy su cambio de nombre revuelve aromas de podredumbre que revelan la misma chola ratera de antes del Ing. Bakovic, pero con otra pollera.

Lo ratifica la infección que expusiera la Superintendencia de Hidrocarburos en YPFB, un puchichiinfecto que Evo Morales y sus capos intentaron tapujar cual si fuera un simple espinillo de adolescente. El gobierno mostró la hilacha de que YPFB será otra vez vaca lechera del abusivo de turno, cortando la cabeza de los que sajaron la pústula y apretaron para que salga el pus. Encima, degradan la entidad que supervisa el correcto funcionamiento del sector para que sea un saludo a la bandera.

Semejante conducta chueca permite apuntar al segundo ídolo de pies de barro del gobierno: la nacionalización de hidrocarburos. Dan náuseas tanto culipandear con la farsa de nacionalizar. Hasta algunos privatizadores de ayer la ensalzan, incapaces que son de justificar posturas que en el pasado sostuvieron con ahínco. Yo no me corro, pero quizá lo haga el ministro de defensa que otrora la ensalzara, de que ayer me sedujo la astucia del gringo presidente al capitalizar las ineficientes empresas estatales, hasta que el tufillo de corrupción de la letra fina del proceso se hizo insoportable.

Pero tampoco se justifica ir de una capitalización hedionda a una nacionalización trucha -y quizá podrida también. Tan cacareada movida no existe, salvo para hacer escarnio del ordenamiento legal de la nación, que es vector de la enfermedad que tiene al país en virtual cuarentena: la inseguridad jurídica. El Tribunal Constitucional, máxima instancia de apelación hasta que una Constituyente sin el freno de dos tercios de voto invente el Consejo de Amautas, ratifica algo incontestable: que un país se sostiene en una armazón jurídica. A tal respecto se tiene la Ley 3058 de Hidrocarburos y el politiquero decreto "nacionalizador". Es dúo incongruente, aún anotando que los contratos de capitalización no fueron refrendados por el Congreso.

Más aún, Bolivia no es excepción en un mundo ordenado por acuerdos y contratos bilaterales y multilaterales que tienen fuerza de ley. El "decreto de nacionalización" puede haber redituado al presidente un show politiquero de toma militar de predios petroleros, a expensas de resentir a países amigos. Su vigencia dependerá de los convenios bilaterales y multilaterales con Brasil, España, Francia y Estados Unidos, cuyas empresas petroleras están amparadas por tales acuerdos.

Ya no son tiempos de enviar cañoneras a sitiar puertos para forzar cumplimientos, aparte de que Bolivia es mediterránea. Ni un arbitraje internacional logrará lo que pudo obtenerse de buenas maneras: mejorar los términos de contratos con las petroleras, y dar impulso a sus inversiones en toda la cadena productiva, asociados con YPFB. En claro queda que los logros politiqueros de la nacionalización son poca cosa, comparados con que en los pleitos se perderá dinero, porque los litigios no son gratuitos; tiempo, porque son procesos largos que postergarán el desarrollo del sector; y motivación, porque se rifó la imagen de seguridad jurídica que incentiva las inversiones extranjeras: tecnología y capital que Bolivia necesita. Se han paralizado las inversiones en el sector y son más de 30 las empresas energéticas que han cesado operaciones en el país. ¿Qué disfraz se pondrá el país si el arbitraje determina que pague las inversiones realizadas, más daños y perjuicios?

¿Será que los que hoy gobiernan son tan levudos como para no percibir estas repercusiones? No señor. El meollo de la nacionalización es poner en bandeja las reservas de gas y petróleo boliviano al padrino venezolano. Hugo Chávez fue el padrino benevolente que regaló millones de libre disponibilidad, para que el ahijado boliviano fuera elegido y jugara al austero que recorta sueldos para construir escuelas, que trae médicos y alfabetizadores cubanos para curar ojos y enseñar el abecé en rimas castristas. Sin embargo, Hugo Chávez será duro patrón de una Bolivia cuyo presidente Morales imita el libreto chavista para perpetuarse en el poder, pero que dependerá de los millones del petróleo venezolano para darse aires y subsistir. Porque de mejorar la economía del país, hasta ahora nada.

Las reservas bolivianas de gas son la garantía de pago. Permiten al dictador venezolano jugar a la geopolítica mundial con su petróleo, y con nuestro gas también. ¿No fue estúpido adherirnos al gasoducto que llevará gas venezolano a los mercados naturales de Bolivia? Es doblemente majadero alienar con hostigamientos a la brasileña Petrobrás y a la española Repsol, mientras Venezuela abre los brazos a sus inversiones que están migrando a ese país. ¿No es triple zoncera que el desarrollo de las reservas energéticas bolivianas se vuelva el vagón de cola de una ineficiente PDVSA?

La clave de tanto desatino es que el padrino Chávez se ha aprovechado de un ingenuo ahijado boliviano, para torpedear su sector de hidrocarburos y ocupar el vacío resultante. Es un salvador de la patria que pronto hasta tropas militares nos mandará.

La nacionalización tropieza en su principal actor, YPFB

Publicado en La Razón.

El Ejecutivo prepara un proyecto de ley para reorganizar a la estatal. Dice que este proceso queda suspendido temporalmente. Se gestionan 180 millones de dólares ante el Banco Central de Bolivia.

El Gobierno reconoció ayer que desde el 1 de mayo se avanzó poco en la ejecución del decreto de nacionalización, por lo que ahora, tres meses después, elabora un plan para salvar ese proceso.

Según un comunicado enviado ayer por el Ministerio de Hidrocarburos, este plan consiste en la elaboración de un proyecto de ley —que es trabajado de manera conjunta entre esa cartera de Estado y Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB)— para reorganizar a la estatal.

El decreto de nacionalización 27801, aprobada el 1 de mayo pasado, establecía que, en 60 días, se procedería a la reestructuración integral de Yacimientos, “convirtiéndola en una empresa corporativa, transparente, eficiente y con control social”.

Desde todas las atribuciones que le otorga el decreto supremo, Yacimientos sólo asumió el control del mercado mayorista de carburantes —aunque aún no tiene la capacidad operativa— y designó a sus directores en cinco compañías nacionalizadas. También negoció el incremento en el precio del gas que el país vende a Argentina y aumentó la participación para el Estado en hasta 82 por ciento en los campos San Antonio y San Alberto, con lo que generará hasta fin de año alrededor de $us 270 millones.

En cuanto a las otras tareas, como el control de las refinerías, la negociación de los nuevos contratos con las empresas petroleras, la fijación de un nuevo precio para el gas que importa Brasil y la importación y exportación de petróleo, los avances son escasos.

Precisamente, el comunicado del Ministerio de Hidrocarburos señala que, por ahora, la participación de YPFB en toda la cadena productiva del sector “está temporalmente suspendida, debido a la falta de recursos económicos”. Señala que este paso se dará cuando se desembolsen $us 180 millones gestionados ante el Banco Central de Bolivia para que la estatal pueda ejercer las tareas que la nacionalización le otorgó.

Mientras tanto, añade el comunicado, las negociaciones para que las empresas petroleras que operan en el país cambien sus contratos continuarán en el marco de la nacionalización.

Sin embargo, para el cambio de contratos, se requiere previamente las auditorías a los campos petroleros, “con cuyos resultados se podrá establecer la participación definitiva de las empresas en esos contratos”.

En los más de 90 días, después de la nacionalización, el Gobierno tampoco pudo conseguir el 51 por ciento de las acciones de las capitalizadas petroleras: Chaco, Andina y Transredes, para así controlarlas. Sólo logró transferir las acciones de los bolivianos en las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) a la petrolera estatal y nombró sus directores y síndicos en esas empresas.

Además, Yacimientos tampoco logró tomar el control de las refinerías de propiedad de Petrobras y de la Compañía Logística de Hidrocarburos de Bolivia (CLHB), porque las negociaciones para comprar el 51 por ciento de acciones aún no prosperan.

En medio de todo este proceso, surgió un conflicto entre Yacimientos y la Superintendencia de Hidrocarburos por un contrato que la estatal suscribió con una intermediaria y que el organismo regulador observó. El comunicado del Ministerio de Hidrocarburos dice que la próxima semana se entregará el informe de auditoría interna y que éste será remitido a la Contraloría.

El precio del gas, en veremos

Petrobras y Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) resolvieron ayer extender el plazo inicial de negociaciones sobre el pedido de revisión de precios del contrato de compra-venta de gas (GSA) por 60 días más.
La decisión fue adoptada ayer tras la reunión sostenida entre los ejecutivos de YPFB y Petrobras en el marco del cronograma de encuentros para fijar el nuevo precio del gas boliviano.

Según un comunicado entregado por Petrobras a los medios de comunicación, “el nuevo plazo permitirá a Petrobras y YPFB profundizar, en forma conjunta, los esfuerzos en busca de soluciones mutuamente aceptables para el tema en discusión”.

La próxima reunión entre los representantes de ambas empresas está marcada para el 14 de septiembre, en Bolivia.
El jueves, el presidente de Petrobras, José Sergio Gabrielli, admitió que las negociaciones con YPFB iban a tomar más tiempo de lo proyectado inicialmente.

Dimite superintendente desautorizado por el presidente Morales.

Publicado en Terra.es

El superintendente de Hidrocarburos de Bolivia, Santiago Berríos, informó hoy de que ha dimitido de su cargo porque el presidente, Evo Morales, desaprobó su decisión de relevar a una de las altas funcionarias de esa institución.

Berríos, quien asumió el cargo el 28 de agosto pasado, dijo en una rueda de prensa que intentó formar un equipo de su confianza en la Superintendencia, pero la directora de Administración, Inés Avalos, no quiso renunciar y se amparó en el presidente.

Señaló que Morales 'le dio su absoluto apoyo a esta funcionaria y eso determinó' que presentara la dimisión al mandatario el jueves pasado, dijo Berríos.

Berríos dijo que desde este jueves está a la espera de una respuesta del mandatario a su carta de renuncia y que su posible continuidad en el cargo depende del respeto a su decisión de relevar a esa funcionaria.

Avalos ejerció el cargo de Superintendente interina antes del ingreso de Berríos, durante un viaje al exterior del ex titular del puesto Víctor Hugo Sainz, que fue quien denunció un caso de presunta corrupción en la estatal petrolera YPFB relativo a un contrato para vender crudo a Brasil.

Avalos firmó un comunicado que contradecía la denuncia realizada por Sainz y fue criticada por los otros funcionarios de la entidad porque su posición no tenía un aval técnico y jurídico.

El caso fue resuelto por Morales con el relevo del presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Jorge Alvarado, pero también de sus acusadores, Sainz, un viceministro del sector y dos funcionarios técnicos de la entidad reguladora a los que Berrios luego ratificó en sus cargos.

Berrios señaló que la dimisión de Avalos fue una de las cuatro renuncias que pidió en la Superintendencia con el propósito de contratar a profesionales de su confianza que son miembros de la Alianza Patriótica de Abogados (APA) que él preside.

Esa organización fue la primera que denunció, en el 2004, la presunta situación irregular de los contratos firmados por las multinacionales petroleras en Bolivia por no haber sido aprobados por el Congreso nacional.

En la carta enviada al presidente Morales, Berríos calificó la desaprobación del cambio de Avalos como 'un actitud de presión' de parte del Gobierno.

En la rueda de prensa, señaló además que la funcionaria no tiene 'una formación completa' y no ha demostrado un trabajo eficiente.

Agregó que la entidad reguladora también enfrenta dificultades porque los reglamentos con los que funciona son parte de la antigua ley de Hidrocarburos que fue derogada en mayo del año pasado.

'Le he dicho al presidente de la República, con toda sinceridad y honestidad, que en ninguna parte del mundo, he visto que se trabaje con normas secundarias' que tienen que ver con una ley inexistente, apuntó el abogado.

agosto 29, 2006

Morales destituye a Alvarado y a quienes le denunciaron, altos cargos de hidrocarburos.

Publicado en La Vanguardia.

La superintendencia suspende el contrato para exportar crudo a Brasil porque iba a causar pérdidas al Estado.

La Paz. (EFECOM).- El presidente de Bolivia, Evo Morales, relevó al principal ejecutivo de la petrolera estatal YPFB, Jorge Alvarado, acusado de infringir la nacionalización de los hidrocarburos dictada en mayo pasado, y destituyó de paso a todos los altos cargos que hicieron o secundaron esa acusación.

En presencia de Alvarado, Morales tomó juramento en el palacio de gobierno de La Paz al nuevo presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Juan Carlos Ortiz Banzer, que hasta hoy era vicepresidente de administración, contratos y fiscalización de la misma empresa.

Antes, el portavoz presidencial, Alex Contreras, leyó una «carta de renuncia» de Alvarado, en la que califica de «falsas» las acusaciones de corrupción formuladas por la oposición y los medios informativos.

Morales nombró al abogado Santiago Berríos Caballero nuevo superintendente de Hidrocarburos, en reemplazo de Víctor Hugo Sáinz, que había presentado la denuncia contra Alvarado y había resistido las presiones del Ejecutivo para que rectificara.

Berríos había sido nombrado antes síndico (fiscalizador) en Andina, empresa mixta en la que tiene la mayoría de las acciones la hispano-argentina Repsol YPF, pero no pudo asumir su cargo por oposición de ésta, según relató el mismo a Efe.

También hay un nuevo viceministro de Exploración y Producción del ministerio de Hidrocarburos, Guillermo Aruquipa, asesor de la nacionalización, en reemplazo de Julio Gómez, que había criticado a YPFB y apoyado a la superintendencia.

Fueron destituidos hoy, además, el director jurídico de ese organismo regulador, Ramiro Ergueta, y la directora de análisis económico, Tatiana Genucio, que elaboraron el informe contra Alvarado.

El ex presidente de YPFB fue acusado hace cinco semanas de violar las normas de la nacionalización que dictó Morales el 1 de mayo, al firmar un contrato con una intermediaria para exportar crudo a Brasil, porque la petrolera estatal tiene el monopolio de la comercialización de los hidrocarburos. Además, el contrato se adjudicó sin concurso público y se violaron otras normas de procedimiento, según la superintendencia, el ministerio de Hidrocarburos y la Contraloría General.

Sin embargo, Morales insistió hoy en que cree en la inocencia de Alvarado, aunque aceptó su renuncia y reconoce que pudo cometer errores, ya que hay en su contra varios dictámenes de «responsabilidad administrativa». Volvió a denunciar una «conspiración» contra la nacionalización y señaló a la oposición como responsable del periodo de incertidumbre registrado durante el último mes. «El compañero Alvarado es incorruptible», dijo el gobernante en presencia del ya ex presidente de YPFB.

La superintendencia del sector suspendió el contrato firmado por Alvarado para exportar crudo a Brasil porque, supuestamente, iba a causar pérdidas al Estado por cerca de 38 millones de dólares.

La denuncia, que aún investiga la Fiscalía de La Paz, fue rechazada por Alvarado a pesar de que el ministerio de Hidrocarburos y la Contraloría General emitieron informes coincidentes de que vulneró varias normas. Los nuevos funcionarios juraron sus cargos ante Morales, el vicepresidente Alvaro García Linera y el ministro del sector, Andrés Soliz Rada, que la semana pasada fue censurado por la mayoría opositora en el Senado.

Con los cambios de hoy, Morales espera zanjar la mayor crisis política de sus primeros siete meses de gobierno, y acallar las críticas que recibe porque su principal bandera, la nacionalización de los hidrocarburos, no ha podido concretarse en aspectos fundamentales.

YPFB no ha podido asumir el monopolio de la comercialización del gas, el petróleo y sus derivados, como manda el decreto del 1 de mayo, por falta de recursos. Además, están a punto de cumplirse cuatro de los seis meses fijados para negociar nuevos contratos con las multinacionales que operan en Bolivia, encabezadas por la brasileña Petrobras y Repsol YPF, pero las conversaciones están en punto muerto.

La petrolera estatal boliviana tampoco ha conseguido recibir nuevos recursos derivados de la nacionalización, ni dominar la mitad más una de las acciones de cinco empresas mixtas privatizadas por anteriores gobiernos y re-nacionalizadas en mayo.

agosto 28, 2006

El Gobierno reconoce que el proceso de nacionalización de los hidrocarburos requerirá de 'al menos 20 años'.

Publicado en Terra.es

El Gobierno boliviano reconoce que el proceso de nacionalización de los hidrocarburos requerirá de 'al menos 20 años' ya que no será fácil reconstruir la estructura operativa de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) antes de su privatización.

De hecho, el superintendente de Hidrocarburos, Víctor Hugo Sainz, afirmó que se necesita 'mucho tiempo' para modificar la normativa y establecer el escenario adecuado para ejecutar la nacionalización, decretada el 1 de mayo por el presidente, Evo Morales.

'Se han tomado 10 años en destruir la industria, y el Gobierno lo está construyendo en seis meses. El proceso va a tomar 10, 15 ó 20 años y quien diga en dos años no sabe de que está hablando. Está creando falsas expectativas no sé por qué motivos', indicó Sainz.

En una entrevista a un periódico local, recogida por Europa Press, recordó que pese a contar con la nueva Ley de Hidrocarburos y el decreto de Morales, el marco legal todavía no está claro, motivo por el que las inversiones para este sector se han 'paralizado'.

'AFINAR' LA NORMATIVA

'Ahora los potenciales capitales esperan reglas claras para poder operar (...) El proceso de nacionalización es un arduo camino, que puede tomar muchos años, no sólo seis meses o 180 días', insistió el superintendente de Hidrocarburos.

Además, subrayó que la actual normativa con la que operan las empresas petroleras extranjeras tiene que ser 'afinada y en algunos casos modificadas', para adecuarse a la coyuntura por la que pasa Bolivia con la administración de Evo Morales.

'Si bien existen expectativas por parte de la oposición sobre la nacionalización que encara Morales, en el pasado los representantes de ese sector se encargaron de destruir la industria, proceso que les tomó unos 10 años. Ahora que no vengan a reclamar', añadió.

Por último, reconoció que aunque la nacionalización avanza 'a paso lento' y que los cambios en el sector regulador acaban de empezar, son conscientes de que las normas legales no están aún claras, y que por ello no pueden cumplir con sus objetivos.

agosto 13, 2006

Evo no logra concretar nacionalización

Publicado en La República.

EN ESPERA • A más de cien días de esta medida siguen estancadas las negociaciones con Repsol YPF y Petrobrás • La empresa estatal carece de recursos para ejercer el control de los negocios del sector.

Antonio Martínez. EFE.

A más de cien días de la nacionalización de los hidrocarburos decretada el 1º de mayo por el presidente de Bolivia, Evo Morales, su gobierno no logra concretar varios aspectos fundamentales de aquella medida.

Superados tres de los seis meses que fijó el decreto para firmar nuevos contratos entre el Estado y las multinacionales que quieran seguir en Bolivia, continúan estancadas las negociaciones con la hispano-argentina Repsol YPF, la brasileña Petrobrás y otras empresas.

Además, el gobierno reconoció el viernes, en un comunicado, que la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) carece de los recursos suficientes para ejercer el control pleno de los negocios del sector, y cumplir así con la nacionalización.

YPFB aún no consigue la mitad más una de las acciones de varias petroleras mixtas privatizadas por anteriores gobiernos y re-nacionalizadas en mayo.

Sobre las negociaciones con las multinacionales, el ministro de Hidrocarburos, Andrés Soliz, en varias de sus muy frecuentes declaraciones públicas de los últimos meses, dijo que para ello son fundamentales unas auditorías que encargaría el gobierno, pero que tampoco están terminadas.

Soliz anunció a mediados de mayo que en “tres meses” estarían listas esas revisiones de las cuentas de nueve petroleras, “para tener los otros tres (meses, del plazo de seis) destinados a la negociación de los contratos”.

“Las auditorías nos van a demostrar si la perforación de pozos ha costado US$ 35 millones”, agregó Soliz, que pone en duda la contabilidad de las multinacionales.

El ministro explicó entonces que esa cifra es excesiva en comparación con las “perforaciones en el mar del Norte o Noruega, (donde) apenas llegan a 15 ó 20 millones”.

Financiamiento

El gobierno de Bolivia gestiona ante el Banco Central un desembolso de US$ 180 millones para que YPFB opere a plenitud en toda la cadena productiva.

agosto 12, 2006

La nacionalización tropieza en su principal actor, YPFB

Publicado en La Razón.

El Ejecutivo prepara un proyecto de ley para reorganizar a la estatal. Dice que este proceso queda suspendido temporalmente. Se gestionan 180 millones de dólares ante el Banco Central de Bolivia.

El Gobierno reconoció ayer que desde el 1 de mayo se avanzó poco en la ejecución del decreto de nacionalización, por lo que ahora, tres meses después, elabora un plan para salvar ese proceso.

Según un comunicado enviado ayer por el Ministerio de Hidrocarburos, este plan consiste en la elaboración de un proyecto de ley —que es trabajado de manera conjunta entre esa cartera de Estado y Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB)— para reorganizar a la estatal.

El decreto de nacionalización 27801, aprobada el 1 de mayo pasado, establecía que, en 60 días, se procedería a la reestructuración integral de Yacimientos, “convirtiéndola en una empresa corporativa, transparente, eficiente y con control social”.

Desde todas las atribuciones que le otorga el decreto supremo, Yacimientos sólo asumió el control del mercado mayorista de carburantes —aunque aún no tiene la capacidad operativa— y designó a sus directores en cinco compañías nacionalizadas. También negoció el incremento en el precio del gas que el país vende a Argentina y aumentó la participación para el Estado en hasta 82 por ciento en los campos San Antonio y San Alberto, con lo que generará hasta fin de año alrededor de $us 270 millones.

En cuanto a las otras tareas, como el control de las refinerías, la negociación de los nuevos contratos con las empresas petroleras, la fijación de un nuevo precio para el gas que importa Brasil y la importación y exportación de petróleo, los avances son escasos.

Precisamente, el comunicado del Ministerio de Hidrocarburos señala que, por ahora, la participación de YPFB en toda la cadena productiva del sector “está temporalmente suspendida, debido a la falta de recursos económicos”. Señala que este paso se dará cuando se desembolsen $us 180 millones gestionados ante el Banco Central de Bolivia para que la estatal pueda ejercer las tareas que la nacionalización le otorgó.

Mientras tanto, añade el comunicado, las negociaciones para que las empresas petroleras que operan en el país cambien sus contratos continuarán en el marco de la nacionalización.

Sin embargo, para el cambio de contratos, se requiere previamente las auditorías a los campos petroleros, “con cuyos resultados se podrá establecer la participación definitiva de las empresas en esos contratos”.

En los más de 90 días, después de la nacionalización, el Gobierno tampoco pudo conseguir el 51 por ciento de las acciones de las capitalizadas petroleras: Chaco, Andina y Transredes, para así controlarlas. Sólo logró transferir las acciones de los bolivianos en las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) a la petrolera estatal y nombró sus directores y síndicos en esas empresas.

Además, Yacimientos tampoco logró tomar el control de las refinerías de propiedad de Petrobras y de la Compañía Logística de Hidrocarburos de Bolivia (CLHB), porque las negociaciones para comprar el 51 por ciento de acciones aún no prosperan.

En medio de todo este proceso, surgió un conflicto entre Yacimientos y la Superintendencia de Hidrocarburos por un contrato que la estatal suscribió con una intermediaria y que el organismo regulador observó. El comunicado del Ministerio de Hidrocarburos dice que la próxima semana se entregará el informe de auditoría interna y que éste será remitido a la Contraloría.

El precio del gas, en veremos

Petrobras y Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) resolvieron ayer extender el plazo inicial de negociaciones sobre el pedido de revisión de precios del contrato de compra-venta de gas (GSA) por 60 días más.
La decisión fue adoptada ayer tras la reunión sostenida entre los ejecutivos de YPFB y Petrobras en el marco del cronograma de encuentros para fijar el nuevo precio del gas boliviano.

Según un comunicado entregado por Petrobras a los medios de comunicación, “el nuevo plazo permitirá a Petrobras y YPFB profundizar, en forma conjunta, los esfuerzos en busca de soluciones mutuamente aceptables para el tema en discusión”.

La próxima reunión entre los representantes de ambas empresas está marcada para el 14 de septiembre, en Bolivia.
El jueves, el presidente de Petrobras, José Sergio Gabrielli, admitió que las negociaciones con YPFB iban a tomar más tiempo de lo proyectado inicialmente.

agosto 11, 2006

Bolivia admite no tener recursos para ejecutar nacionalización

Publicado en El Mostrador.

Ministerio de Hidrocarburos reconoció que "la plena vigencia de la participación" de YPFB en toda la cadena productiva del sector "está temporalmente suspendida debido a la falta de recursos económicos de la empresa estatal".

El Gobierno de Bolivia admitió que la petrolera estatal YPFB carece de los recursos económicos suficientes para ejercer el control pleno del negocio de los hidrocarburos en el país y cumplir así con la nacionalización dictada en mayo pasado.

El Ministerio de Hidrocarburos señaló en un boletín que "la plena vigencia de la participación" de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) en toda la cadena productiva del sector "está temporalmente suspendida debido a la falta de recursos económicos de la empresa estatal".

"Para superar esta limitación se gestiona ante el Banco Central un desembolso de 180 millones de dólares, con los cuales YPFB operará en toda la cadena productiva", indica el comunicado.

Una de las tareas asignadas a YPFB por el decreto de nacionalización y que la firma aún no puede asumir es la gestión de los ingresos del país por la comercialización de los hidrocarburos.

Esa atribución había sido fijada por dos resoluciones ministeriales dictadas el 28 de julio de pasado y dejadas en suspenso por otra emitida cuatro días después, según documentación a la que accedió hoy Efe y que todavía no había sido divulgada.

Los fondos obtenidos por la venta de carburantes debían ser transferidos por las compañías petroleras que comercian los hidrocarburos a una cuenta de YPFB en el Banco Central, en lugar de ir a al Tesoro General de la Nación.

Con esos recursos, YFPB debía distribuir la regalía a las regiones y el Impuesto Directo a los Hidrocarburos, dar a las compañías su porcentaje en el negocio y quedarse con su participación, que es del 32 por ciento.

Entre las compañías extranjeras que comercian carburantes en Bolivia están la hispano-argentina Repsol YPF, la brasileña Petrobras, la francesa TotalFinaElf y las filiales de las británicas British Gas y British Petroleum.

La cartera de Hidrocarburos también señaló que junto con YPFB está terminando de elaborar un proyecto de ley para reorganizar la empresa estatal "de modo que pueda aplicar lo dispuesto por el decreto de nacionalización" firmado el 1 de mayo.

En su comunicado, el Ministerio confirmó que continúan las negociaciones para la firma de contratos con las compañías multinacionales que desean operar en el marco de la nacionalización.

Agregó asimismo que prosiguen las auditorías a los campos de gas para determinar la participación definitiva de las empresas en los contratos.

julio 15, 2006

El aumento del precio del gas a Chile llegará hasta un 100%.

Publicado en Clarín.

Chile recibirá desde hoy el gas argentino con un aumento de hasta 100%, aseguraron fuentes oficiales argentinas. El precio promedio que pagará el país trasandino por el combustible trepará a entre 3,20 y 3,40 dólares por millón de BTU, valor que sin embargo sigue estando por debajo de los 5 dólares que Argentina le abonará también desde hoy a Bolivia, según el precontrato firmado ayer por la tarde.

Hoy empiezan a regir los acuerdos cerrados con Bolivia para garantizar la compra de 7,7 millones de metros cúbicos de gas diarios, que implicaron que el combustible pasara a costar 5 dólares contra los 3,20 que se venían pagando. Hasta última hora de ayer se estuvo negociando la letra chica del contrato de compra. Cerca de las 5 de la tarde, el titular de la empresa estatal de energía Enarsa, Exequiel Espinosa, llamó al ministro de Planificación Julio De Vido para anunciarle que "firmamos un precontrato para poner en marcha ya las importaciones".

Enarsa será la que le compre el gas a la también estatal boliviana YPFB, cuando hasta ahora eran operaciones entre privados. El precontrato firmado ayer, aseguraron altas fuentes de Planificación, "incluye que para setiembre tenemos que tener ya definida la fórmula con que a partir de enero se fijará el precio del gas que importemos, y a la vez garantiza la provisión de 27 millones de metros cúbicos por 30 años, como para poner en marcha el Gasoducto del Nordeste".

El criterio del Gobierno argentino es trasladar el aumento del gas boliviano a las exportaciones de gas que se hacen a Chile, Uruguay y Brasil. Hoy, Chile importa unos 15 millones de metros cúbicos diarios y Uruguay medio millón, mientras que Brasil no está comprando gas. Al repartir el aumento sellado en La Paz sobre las exportaciones argentinas, se había calculado que el gas pasaría de un precio que va hoy de 1,20 a 1,80 dólares a una franja de 2,40 a 2,70. "Pero cuando hicimos las cuentas con más detalles, teniendo en cuenta los impuestos y también el 1% de comisión que cobrará Enarsa en toda esta operación, porque ellos no pueden trabajar a pérdida, el precio final nos da entre 3,20 y 3,40 dólares por millón de BTU", señalaron las mismas calificadas fuentes. El incremento se aplicará a través de un aumento de las retenciones a las exportaciones, que anoche estaba terminando de definir el Ministerio de Economía.

Este nuevo incremento en los precios generará, con seguridad, una mayor presión en Chile. En los últimos días, el gobierno de Michelle Bachelet mantuvo negociaciones con distribuidoras de gas y generadoras de electricidad para que absorban el alza sin trasladarla a los consumidores.

En ese contexto, la presidenta Bachelet (que ayer renovó su Gabinete) le pidió una audiencia a Néstor Kirchner para la semana próxima, durante la cumbre de mandatarios del Mercosur que se realizará en Córdoba. De Vido iba a viajar a Francia por un acuerdo de trenes, pero ahora se quedará para participar de ese encuentro.

El gas argentino le costaría US$ 110 millones más a Chile.

Publicado en La Nación.

Con más retenciones, se transfiere el alza del precio del gas que la Argentina compra a Bolivia

Cuando desde hoy entre en vigor el acuerdo que firmaron los presidentes Evo Morales y Néstor Kirchner -que eleva el precio del gas que la Argentina le compra a Bolivia de 3,40 a 5 dólares el millón de BTU (la unidad de medida)- el Gobierno deberá desembolsar alrededor de US$ 110 millones más por año al país del Altiplano. Y, también desde hoy, la Argentina intentará transferir completamente ese mayor costo a sus clientes de Chile -vía retenciones a las exportaciones de gas- para evitar un alza de precios en el mercado local.

Al menos ésa es la teoría. En la práctica reina la confusión sobre cómo será la operación de importación y exportación de gas boliviano. Sucede que hoy es la fecha que los gobiernos argentino y boliviano dispusieron para que rija el nuevo valor del fluido, y es el momento donde Repsol YPF y Petrobras -que hasta ahora eran quienes importaban el gas desde Bolivia- deben dejar su lugar a la petrolera estatal Energía Argentina (Enarsa).

El ministro de Planificación, Julio De Vido, dijo ayer que el Gobierno trasladará a Chile la "incidencia exacta" del alza en el precio del gas que importa desde Bolivia. "Las retenciones serán equivalentes a la incidencia exacta que tienen en el precio del gas para la Argentina los 5 millones de metros cúbicos que entrarán desde Bolivia a 5 dólares por millón de BTU ([Unidad Térmica Británica]", explicó el funcionario a la prensa en un acto de inauguración de obras públicas. "[El tema] está a la firma de la ministra de Economía, Felisa Miceli, que está haciendo los últimos análisis junto con técnicos de la Aduana y asesores legales, y en las próximas horas se dará a conocer la resolución", aclaró De Vido.

Si la Argentina importara los cinco millones de metros cúbicos diarios de gas que dice De Vido (el acuerdo habla en realidad de 7,7 millones), la operación pasaría de costar 630.000 dólares por día a 925.000. Es decir que durante un año el Gobierno deberá pagar por esa compra 338 millones de dólares en lugar de los 229 millones que abonaba hasta ahora.

El convenio establece que la Argentina podría comprar hasta 27 millones de metros cúbicos diarios. Ese volumen, a valores de hoy, representa US$ 919 millones por año, pero si el país compra en el futuro todo lo que le permite el acuerdo, tendrá que pagar US$ 1351 millones por año.

Cada una de las palabras de los funcionarios del área de Energía fueron seguidas ayer con mucha atención desde Chile. "La ministra [de Energía y Minería, Karen Pochianik] no va a hablar del tema en el día de hoy [por ayer], aunque se espera un anuncio en la materia durante el fin de semana", dijo una fuente cercana a la ministra a LA NACION (ver página 2).

Para ayer se esperaba que el Gobierno diera a conocer el nuevo régimen de retenciones a las exportaciones de gas, que actualmente grava las ventas al exterior en un 20 por ciento. Sin embargo, la resolución no fue publicada en el Boletín Oficial.

"La verdad es que saber a qué valor se comprará el gas es toda una incógnita. No se sabe absolutamente nada y en teoría esto ya debería estar decidido", dijo un empresario del sector.

Otra de las dudas que flotó durante toda la semana y que nadie despejó tiene que ver con los fondos para comprar el gas boliviano. "Enarsa es una empresa que no tiene dinero suficiente como para hacer la compra. Es necesario que se le provea de dinero, por lo menos hasta que se cobren las retenciones y el Gobierno vuelva a destinar ese dinero", dijo un consultor que trabaja a diario con las empresas petroleras. De Vido dijo que la suba en el precio del gas boliviano no repercutirá "en absoluto" en los usuarios locales.

"Aquí el que compra es Enarsa y el que vende YPFB (Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos), con lo cual el Estado argentino garantiza el pago sin perder un solo peso y sin ganar tampoco, porque no estamos especulando con la diferencia de precio", acotó.

Un abogado especialista en cuestiones energéticas se preguntaba ayer si existe un contrato de compraventa internacional en el que se obliguen Enarsa e YPFB. "En realidad, lo que hay es un convenio marco que firmaron los dos países. También debería haber un contrato entre dos empresas y no sólo un acuerdo bilateral", sostuvo.

También resta saber cómo se hará el pasaje de dinero desde las cuentas públicas hasta una sociedad anónima como Enarsa que, si bien tiene participación estatal mayoritaria, se rige por las normas de derecho privado.

Ocurre que el dinero que se podría recaudar por retenciones a las exportaciones de gas ingresa en las cuentas públicas, ya que son impuestos nacionales. Después de recaudarlos, el Poder Ejecutivo debería destinarlo mediante transferencias o subsidios a la petrolera estatal.

Otra incógnita es qué pasará si lo recaudado por las ventas de gas a Chile no alcanzan para pagar el total de la diferencia que existe entre una compra a cinco dólares por millón de BTU y una venta a 1,30 en el mercado interno.

Por Diego Cabot
De la Redacción de LA NACION

julio 14, 2006

Arrancan con dudas los acuerdos de precios por el gas con Bolivia y Chile.

Publicado en Clarín.

Con más dudas que certezas, a partir de mañana entrarán en vigencia los nuevos precios para la importación y exportación de gas natural que Argentina comercializa con los países vecinos.

En el caso de Bolivia, el valor del combustible que ingresa al país registrará un aumento promedio del 56%, al pasar de US$ 3,20 a US$ 5 el millón de BTU.

En tanto, en el caso de Chile el precio del gas que se exporta desde los yacimientos locales sufrirá una suba del 35% por la aplicación de una retención diferencial que elevará de US$ 2 a US$ 2,70 el valor final por millón de BTU.

Los ajustes en los precios del gas que Argentina compra y vende a los países limítrofes surgieron tras el el acuerdo que suscribieron a fines de julio el presidente Néstor Kirchner y par boliviano, Evo Morales. El convenio se sustentó en dos puntos claves: una actualización inmediata del precio de gas del 56% promedio y el incremento de las importaciones a mediano plazo.

Para compensar el aumento pactado con la administración de Evo Morales, el Gobierno resolvió trasladar esa diferencia a los contratos de exportación que tienen las petroleras locales.

Actualmente las exportaciones de gas alcanzan un promedio diario de 16 millones de metros cúbicos, de los cuales el 97% tienen como destino el mercado chileno. De esta manera, la suma adicional de US$ 110 millones que Argentina le pagará a Bolivia, se cubrirá con un aumento en el precio del gas que se despacha mayoritariamente a Chile.

Pese a que los nuevos precios comenzarán a correr a partir de mañana, hasta anoche no se habían definido los instrumentos legales que respaldarán la aplicación de los ajustes.

Por un lado, la estatal Enarsa y la petrolera boliviana YPFB deben suscribir el nuevo contrato de compra-venta que regirá para importación de gas. Y por otro lado, la ministra de Economía, Felisa Miceli aún tiene que aprobar las nuevas retenciones para las exportaciones de gas.

Ayer en Chile recrudecieron las críticas contra la Argentina. El canciller Alejandro Foxley acusó al gobierno de Kirchner de mantener "doble discurso en materia de integración". En tanto, los senadores opositores Sergio Romero y Juan Coloma reclamaron al gobierno de Michelle Bachelet que revise la permanencia de Chile en el Mercosur y denuncie a la Argentina ante la Organización Mundial de Comercio.

En tanto, hoy en Buenos Aires un grupo de organizaciones populares encabezada por el grupo MORENO lanzarán frente a la sede de la compañía Repsol-YPF una campaña nacional para juntar un millón de firmas para la nacionalización del gas y el petróleo.

junio 30, 2006

El gas más caro, para ampliar la oferta local.

Publicado en La Nación.

Desde el 15 de julio próximo y hasta que termine el año, el gobierno argentino pagará por el gas boliviano un 60% más de lo que paga actualmente. Luego de esa fecha, habrá que ver. A cambio, Bolivia concederá a la Argentina la posibilidad de cuadruplicar las compras de gas durante los próximos 20 años.

El gas boliviano, que actualmente es el 5% del total del consumo local, es una de las herramientas a las que el Gobierno recurrió para remediar la escasez que produjo la poca inversión en exploración de gas, afectada por tarifas congeladas desde antes de la crisis.

Esas son las principales certezas que dejó el acuerdo que ayer firmaron los presidentes Néstor Kirchner y Evo Morales. Otra, que si bien no surge del acuerdo, pero que se puede inferir de los lineamientos del Gobierno, es que los mayores costos no serán trasladados a los usuarios residenciales.

Las indefiniciones, por ahora, se refieren al mercado interno. ¿Qué pasará con el combustible cuando ya circule por los gasoductos argentinos? ¿Quién pagará el mayor precio del gas que ingresará ahora?, eran las principales preguntas que se hacían ayer los empresarios del sector.

Actualmente, por el gas boliviano se pagan 3,50 dólares el millón de BTU (unidad térmica de medida), que luego se comercializa en el mercado interno a un valor que ronda 1,50 dólares. Por ahora, las empresas que se encargan de esa operación -Repsol YPF y Petrobras- manejan el negocio a pérdida y compensan con otros más redituables.

Ahora esa operación estará en manos de la estatal Enarsa. Será la empresa creada por iniciativa del Gobierno la que comercializará el combustible. Claro que para que pueda revender primero tiene que comprar, y para eso deberá tener con qué hacerlo. Dicho de otra forma, habrá que dotar de fondos a la empresa estatal para que compre el gas en la frontera.

Luego, sí tendrá que elegir entre venderlo al precio actual -1,50 US$- y soportar la pérdida, o asumir un rol empresarial y revender el gas con alguna ganancia. En este caso, tendrá que conseguir un comprador dispuesto a transar a ese precio.

Proveedor de largo plazo

El acuerdo no sólo fija un precio, sino que también amplía el volumen de compra. "Hay que tomarlo en forma positiva. La Argentina necesita comprar gas en cantidades adicionales a las actuales. Nos permite pensar en un gasoducto y clarifica bastante el futuro energético argentino. Bolivia será nuestra alternativa de abastecimiento", dijo el ex secretario de Energía Jorge Lapeña. El ex funcionario destacó, además, la posibilidad de proyectar, ahora sí, el postergado gasoducto del Nordeste, que planea construir Techint con alguna participación de Repsol YPF.

No todos lo ven igual: "Es el peor acuerdo que ha hecho la Argentina después que perdió la Banda Oriental. Se le transfieren a Bolivia alrededor de 400 millones de dólares sin justificación", dijo un consultor en energía.

Uno de los puntos que aún restan despejar es cuál será la fórmula que se utilizará para actualizar el precio del combustible. "La fórmula acordada deberá ser competitiva con el precio del combustible alternativo, como el fuel oil", dijo Lapeña.

El acuerdo, aun sin entrar en vigor, ya empezó a levantar críticas en las provincias gasíferas. Ayer volvieron a escucharse las posturas de Neuquén, principal productora de gas, y Salta. "La Argentina debe tener una política para hacer crecer su nivel de reservas, no sus niveles de exportación", dijo el gobernador de Salta, Juan Carlos Romero. Su colega neuquino, Jorge Sobisch, también se mostró descontento. "La decisión de importar gas a 4 o 5 dólares tendrá un impacto inevitable en los consumidores. Arrancar con 5 dólares es muy negativo para la economía", argumentó. El diputado y ex ministro de la provincia José Brillo dijo que es un acuerdo desfavorable para las cuencas nacionales. "¿Se imagina lo que puede pensar una productora local que recibe 1,50 dólares y ve que a Bolivia se le pagan 5?. Esto va en contra de las inversiones", sostuvo.

¿Tendrá garantizado el país gas boliviano por 20 años después del acuerdo? "La Argentina le prometió gas a Chile, y cuando faltó, se cansó de restringirle las exportaciones", contestó un analista.

Bolivia subirá un 56% el precio del gas que vende a la Argentina.


Publicado en La Nación.

Se pagará 5 dólares el millón de BTU hasta fin de año; luego, se diseñará una fórmula de ajuste para los intercambios futuros; se prevé ampliar hasta 20 millones de metros cúbicos el volumen importado

Finalmente, y tal como estaba previsto, la Argentina y Bolivia acordaron hoy un aumento en el precio del gas que el país importa de la nación andina que llevará el valor del fluido de 3,20 a 5 dólares el millón de BTU a partir del 15 de julio y hasta el 31 de diciembre de este año.

El convenio, que implica una suba del 56,25 por ciento respecto del valor que la Argentina pagaba hasta ahora, fue firmado por el presidente Néstor Kirchner y su par boliviano Evo Morales durante un acto que compartieron en Hurlingham.

“Señor, amigo y presidente de Bolivia, el pueblo argentino junto a los hermanos que aquí viven lo recibimos con los brazos abiertos”, le dijo Kirchner a Morales que ya había dado su discurso. Destacó además que el acuerdo alcanzado "es un paso trascendental" para el desarrollo de la región, y afirmó que ayudará a resolver "la ecuación energética en el Cono Sur".

Principales puntos. El acuerdo firmado hoy por ambos mandatarios tiene nueve artículos y tendrá una vigencia de 20 años.

Se establece que el volumen de importaciones de gas final será de 27,7 millones de metros cúbicos. Se incluyen, así, los 20 millones que transportará en el futuro el gasoducto del noreste (GNEA), cuya construcción aún no está definida.

El precio fijado regirá sólo hasta el 31 de diciembre de este año. Antes de esa fecha, representantes de ambos gobiernos diseñarán "una fórmula de ajuste" que, según la letra del convenio, arrojará el precio que regirá desde el 1 de enero del año próximo.

La estatal argentina Enarsa y Yacimiento Petrolíferos Fiscales de Bolivia (YPFB) podrán modificar los volúmenes y los plazos previstos en el convenio. En uno de sus últimos párrafos, además, se abre la puerta para el desembarco de Enarsa en tierras bolivianas: "Ambos Gobiernos instruirán a YPFB y Enarsa para que estudioen la posibilidad de realizar actividades conjuntas de exploración y explotación en Bolivia", dice el convenio.

De hecho, Kirchner afirmó que los acuerdos firmados entre ambas naciones "significan inversiones en materia energética de la región" y además representan "el primer paso para la construcción del gasoducto del noroeste argentino, y para que se pueda industrializar el gas en Bolivia".

Agradecimientos y elogios. Rodeado por el gobernador bonaerense Felipe Solá y el intendente local, Luis Acuña, Kirchner se dirigió a los bolivianos residentes en el país que colmaban las tribunas. “Estoy agradecido a todos los hermanos bolivianos que viven aquí. Queremos una Argentina que crezca para todos los que viven en ella”, destacó.

Antes de despedirse, pidió: “Levanten las banderas de la Argentina y de Bolivia. Es la patria grande que renace para hacer la nación latinoamericana que nos merecemos”.

Por su parte, Morales defendió la decisión de nacionalizar los hidrocarburos de su país. “Hemos recuperado el gas y los hidrocarburos. Ahora, hay que pensar de donde generamos nuevos recursos económicos”, aseguró.

Enseguida, el mandatario boliviano afirmó que “los recursos naturales no pueden ser privatizados” y añadió: “Es verdad que buscamos socios, pero no dueños ni patrones de nuestros recursos naturales”.

Para el final, dejó los elogios para Kirchner: “Nunca había pensado estar al lado de muchos presidentes como el de la Argentina en esta lucha por la igualdad y la justicia en América latina”, destacó.

Chile, entrelíneas. Al respecto, uno de los puntos que Bolivia negoció más arduamente fue el destino del gas que le vende a la Argentina: el gobierno de Evo Morales no quería que terminara en Chile, ya que sus hidrocarburos son la clave para negociar una salida al mar con el país trasandino.

De allí que el artículo tres del convenio indique que los volúmenes contemplados "serán destinados a satisfacer la demanda interna de gas natural" de la Argentina "y no podrán ser destinados a incrementar las autorizaciones de exportación de la Argentina a terceros países".

¿Cómo se controlará esta restricción al uso del gas boliviano? La respuesta no parece ser simple, ya que después de meses de negociaciones la letra del entendimiento dice que los gobiernos de ambos países "implementarán los mecanismos necesarios para dar cumplimiento" a este punto, sin dar más precisiones.

En la Casa Rosada. Antes, Morales había estado reunido durante cerca de media hora con Kirchner en su despacho de la Casa Rosada para ultimar los detalles del acuerdo.

Comitivas. Luego de un primer momento a solas, se sumaron a la reunión el jefe de Gabinete, Alberto Fernández; los ministros de Economía, Felisa Miceli; de Planificación, Julio De Vido; del Interior, Aníbal Fernández y el secretario de Relaciones Exteriores, Roberto García Moritan, en representación del canciller, Jorge Taiana, que se encuentra en Ginebra.

Por Bolivia se incorporaron el canciller, David Choquehuanca; los ministros de la Presidencia, Juan Ramón Quintana; de Planificación, Carlos Villegas, y de Hidrocarburos, Andrés Soliz Rada.

Gesto. La segunda visita de Morales a la Argentina se produjo pocos días después de que Kirchner realizará una encendida defensa del proceso que atraviesan tanto el país andino como la Venezuela de Hugo Chávez, en medio de críticas a los Estados Unidos.

Entre otras cosas, en un discurso ante el Parlamento, recordó que Bolivia es el segundo país más pobre de América latina y que no debe quedar "desintegrado" del concierto internacional.

Kirchner y Morales firman el acuerdo.

Publicado en La Nación.

En un viaje relámpago, el presidente de Bolivia, Evo Morales, firmará hoy con Néstor Kirchner, en la Casa de Gobierno, el acuerdo sobre la exportación de gas a la Argentina en el cual está incluido un aumento del precio, de 3,20 a 5 dólares el millón de BTU (unidad térmica británica), y nuevos volúmenes y plazos.

Luego, a las 11, participará con su anfitrión de la inauguración de un estadio polideportivo en la localidad bonaerense de Hurlingham y regresará de inmediato a Bolivia. Irá a Cochabamba, donde cerrará la campaña de su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS), para la elección de la Asamblea Constituyente y el referéndum autonómico del domingo.

Morales arribará a Buenos Aires a las 9, en un avión militar argentino. Lo hará en un momento especial: en un tiro por elevación contra los Estados Unidos, Kirchner no ahorró elogios hacia él y el presidente de Venezuela, Hugo Chávez (al cual verá el martes y el miércoles próximos en Caracas), durante el discurso que pronunció recientemente en el Congreso de los Diputados de España.

Con la firma del nuevo acuerdo, Morales redondeará una aspiración que anticipó a LA NACION durante la campaña electoral: recomponer el precio del gas que exporta su país a la Argentina. Lo mismo pensaban su entonces adversario, Jorge Tuto Quiroga, y el ex presidente Eduardo Rodríguez.

Entre sus preocupaciones, asimismo, figuran mejores condiciones para los bolivianos que residen en el país y otros proyectos, así como aspectos complementarios del acuerdo sobre el gas.

El acuerdo en sí tendrá efectos colaterales: menor riesgo de que la Argentina deje de suministrar el fluido a Chile, como sucedió durante el gobierno de Ricardo Lagos, lo cual implica un mensaje para la presidenta Michelle Bachelet, y alguna posibilidad de influir en Brasil, cuyo acuerdo con Bolivia aún está pendiente.

En ello obró, cual golpe, la decisión de Morales de nacionalizar los hidrocarburos, lo cual derivó en una reunión de urgencia, en Puerto Iguazú, entre él, Kirchner, Lula y Chávez, el arma de la oposición tanto en las elecciones autonómicas bolivianas como en las presidenciales mexicanas, también previstas para el domingo.

La comitiva que viajará con Morales a la Argentina estará integrada por el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana; la ministra de Gobierno, Alicia Muños Alá; el canciller David Choquehuanca; los ministros de Planificación del Desarrollo, Carlos Villegas; de Hidrocarburos, Andrés Soliz Rada, y de Desarrollo Rural, Agropecuario y Medio Ambiente, Hugo Salvatierra; el presidente del Senado, Santos Ramírez, y el presidente de Diputados, Edmundo Novillo.

Facilidades migratorias

En el acto de hoy, en Hurlingham, estarán el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Felipe Solá, y el intendente local, Luis Acuña.

Fuentes gubernamentales confiaron que esperan gran afluencia de público. Sobre todo, agregaron, de bolivianos radicados en el país, para los cuales Morales pedirá facilidades migratorias y asistencia sanitaria.

En declaraciones a la prensa, el embajador boliviano en la Argentina, Roger Ortiz Mercado, dijo que "los hidrocarburos serán el núcleo central de la integración latinoamericana" y que "existe comunicación ideológica y similar nivel de aspiraciones entre ambos presidentes".

El acuerdo sobre el gas que importa la Argentina viene a remozar un precio deprimido, llamado "solidario". El volumen, sujeto a cambios, es de 7,7 millones de metros cúbicos diarios, pero, según trascendió, podría llegar a 20 millones.

En suspenso queda la cláusula que firmó Kirchner con el ex presidente Carlos Mesa: decía que "ni una molécula del gas" importado por la Argentina podía ser desviada hacia Chile.

Morales, famoso por su chompa (suéter) a rayas y su alergia a la corbata, recompuso la relación con Chile. De su viaje se llevará otra buena noticia: la Argentina, Brasil y Venezuela aprobaron en Caracas el ingreso de Bolivia en el Gran Gasoducto del Sur.

En Madrid, Kirchner recordó que Bolivia es el segundo país más pobre de América latina y que no debe quedar "desintegrado" del concierto internacional. Fue el primero en felicitarlo el día que ganó las elecciones.

Acuerdo limitado entre Evo y Kirchner por el precio del gas.

Publicado en Clarín.

Lo firmaron ayer. Lleva el valor del gas que compra Argentina a US$ 5 la unidad de medida hasta fin de año. Aunque el convenio es a 20 años, ahora se deberá definir cómo ajustar los valores para 2007.

Un aumento superior al 50% en el precio de compra, una financiación local no inferior a los US$ 50 millones para una planta separadora de gases y una cláusula que impide el desvío del combustible a otros países constituyen los puntos salientes del nuevo acuerdo de suministro de gas que cerraron el presidente Néstor Kirchner y su par de Bolivia, Evo Morales.

Tras casi cuatro meses de negociaciones en Buenos Aires y La Paz, los dos mandatarios rubricaron ayer las nuevas reglas de juego para la importación de gas en un estadio polideportivo de Hurlingham, donde compartieron un acto político con la comunidad boliviana del Gran Buenos Aires.

El acuerdo firmado tiene una vigencia de 20 años. Pero en lo que hace a los precios, posee un alcance limitado, ya que los valores deberán ser ajustados.

Tal como había anticipado Clarín, el valor del gas que importa Argentina pasará del promedio de los últimos meses de US$ 3,20 el millón de BTU a US$ 5 a partir del 15 de julio. Según el Gobierno, desde junio ya se venía pagando casi US$ 4 por la actualización automática que tenía el convenio anterior.

El nuevo valor de US$ 5 se mantendría hasta fin de año y partir de enero de 2007 habrá un nuevo ajustepor una fórmula que seguirá los precios internacionales del gas y los subproductos.

El incremento acordado con Bolivia no impactará sobre los usuarios porque la diferencia se trasladará a las exportaciones que tienen las petroleras locales con los países vecinos.

Desde el Ministerio de Planificación que conduce Julio De Vido confirmaron ayer que la suba en el gas importado se va a compensar con una "retención adicional" que se aplicará en forma proporcional a las exportaciones que van a parar mayoritariamente a Chile y en menor medida a Brasil y Uruguay.

Actualmente, Argentina puede importar de Bolivia hasta un máximo de 7,7 millones de metros cúbicos diarios que representa casi el 4% del consumo total del país. Por el lado de las exportaciones, las envíos promedian los 15 millones de metros cúbicos diarios. De ese total, el 95% se destina al mercado trasandino a un precio promedio de US$ 2 el millón de BTU que se había fijado a fines de los 90. Con el nuevo "recargo" que fijará el Gobierno, los importadores chilenos pasarían a pagar entre US$ 2,70 y 3 el millón de BTU.

El acuerdo Kirchner-Morales establece que el Gobierno argentino financiará la construcción de una planta separadora de gases en territorio boliviano. Será operada por YPF de Bolivia, costará no menos de US$ 50 millones y se utilizará para separar el "gas seco" que se envía a la Argentina y los subproductos licuables para el mercado interno boliviano. Según el ministro de Hidrocarburos, Andrés Soliz Rada, "Bolivia aceptó bajar de 5,50 a 5 dólares el precio del gas con la condición de que Argentina afronte la inversión de la planta".

El convenio también contempla que el actual volumen de importación máxima de 7,7 millones de metros cúbicos diarios se ampliará en 20 millones de metros cúbicos una vez que se construya el gasoducto del NEA.

Además, el gobierno boliviano se aseguró que el gas que despacha a la Argentina no podrá se utilizado para incrementar las exportaciones locales a Chile, país con el cual Morales quiere negociar la provisión de combustible a cambio de la recuperación de la salida al océano que tuvo Bolivia hasta fines del siglo XIX.

Al igual que las reglas de juego que rigen entre Argentina y Chile, Bolivia dejó la puerta abierta para restringir las exportaciones de gas. El convenio determina que "el mercado interno boliviano tendrá prioridad en todos los casos" y ante cualquier eventualidad se podrán reducir las entregas al exterior más allá de los acuerdos vigentes.

Bolivia y Argentina incrementan a $us 5 el precio del gas.

Publicado en HoyBolivia.

Buenos Aires, 29 jun (Hoybolivia-Agencias).- El presidente Evo Morales, firmó este jueves con su colega argentino, Néstor Kirchner un nuevo acuerdo que incrementa el precio de venta del gas a 5 dólares por millón de BTU. Este precio regirá a partir del 1 de julio y tendrá vigencia hasta el 31 de diciembre de este año.

La firma del nuevo convenio se realizó en un acto público, ante miles de residentes bolivianos y numerosos partidarios de Kirchner, en el municipio suburbano de Hurlingham, a unos 25 kilómetros al noroeste de Buenos Aires.

Según el nuevo acuerdo, Argentina pagará en adelante cinco dólares el millón de BTU (unidades térmicas británicas) en vez de los actuales 3,20 dólares, por los 7,7 millones de metros cúbicos de gas boliviano que importa diariamente.

Morales y Kirchner sostuvieron una reunión a puertas cerradas en la Casa Rosada previo a la firma del nuevo acuerdo y posteriormente ambos mandatarios partieron en helicóptero hacia Hurlingham, en cuyo estadio polideportivo se efectuó la ceremonia de firma del acuerdo, que también contempla otros temas bilaterales, entre ellos cuestiones migratorias y la situación laboral de los centenares de miles de bolivianos que residen en este país.

El estadio, con capacidad para unas 40.000 personas, estaba colmado por entusiastas bolivianos y argentinos que vitorearon a los dos presidentes, entre el ondear de banderas de las dos naciones.

En su discurso, el presidente Morales, dijo que el "el hecho de que el precio del gas suba a 5 dólares, ya es un alivio económico para mi país que tiene muchas necesidades, pero también muchos recursos".

Añadió que Bolivia está dispuesta a "incrementar los volúmenes de venta de gas a Argentina porque eso ha de beneficiar a ambos países. La decisión de apoyar a Bolivia en la industrialización del gas en el Chaco boliviano eso ayudará bastante a mi país. Es ayudar a gente que ha sido olvidada históricamente", sostuvo Morales.

Dijo también que se espera comprarle tractores a Argentina, para que los pequeños productores de Bolivia puedan encarar tareas agrícolas en mejores condiciones que las actuales. "Estos acuerdos beneficiarán a ambos países. Eso se verá de aquí a poco tiempo, mostrando que estamos dispuestos a trabajar con Argentina y otros países", enfatizó el mandatario.

Dijo también que está buscando todos los procesos de integración latinoamericana en base a los pueblos. Estamos en los tiempos de los movimientos sociales, dijo Morales.

Por su lado, el presidente argentino, Néstor Kirchner, destacó el crecimiento económico que ha tenido su país en los últimos meses, batiendo récords en exportaciones, lo que está permitiendo consolidar su independencia económica, que muestra el esfuerzo que se está haciendo para mejorar su economía.

En lo que se refiere al nuevo precio del gas, dijo que este esfuerzo por mejorar "nuestros acuerdos económicos con Bolivia muestran que se está avanzando por mejores caminos".

Kirchner no escatimó elogios para Morales de quien dijo que es un presidente que está trabajando por Bolivia y los bolivianos y que la cooperación mutua siempre será buena para ambos pueblos.

Acuerdo energético con Argentina consolida la nacionalización: Morales

Publicado en HoyBolivia.

El presidente Evo Morales resaltó la trascendencia del convenio energético que suscribió este jueves con su colega argentino, Néstor Kirchner, indicando que constituyen "la consolidación de la nacionalización de los hidrocarburos".

Durante el acto de cierre de campaña del MAS realizado en el estadio Felix Capriles de Cochabamba, dijo que este acuerdo es un desmentido a quienes auguraban que con la nacionalización de los hidrocarburos, se ocasionaría un bloqueo del país y que no vendrían nuevas inversiones.

Sostuvo que no solo esto no ha ocurrido, sino que los ingresos para el Estado han llegado a los mil millones de dólares por este rubro, sin tomar en cuenta la elevación del precio acordado con la Argentina y el futuro incremento de los volúmenes de venta del gas.

Sostuvo además, que el acuerdo con la Argentina, contempla la industrialización del gas en el Chaco, con un crédito otorgado por el vecino país, sin interés alguno.

Este solo un ejemplo de todo lo que se puede lograr cuando hay un auténtico interés de cambiar, cuando no existe el interés de enriquecerse personalmente y cuando se manda obedeciendo al pueblo, sostuvo en el acto en que Morales presentó a los candidatos de su partido a la Asamblea Constituyente.

En el acto, el Presidente Morales recapituló los avances efectuados por su gobierno hasta la fecha y mencionó las futuras reformas que piensa aplicar. Para ello pidió el respaldo popular para los candidatos del MAS a la Asamblea, ya que este será el escenario donde se consoliden los avances efectuados hasta la fecha y se establezca el marco jurídico que los consoliden y posibiliten las futuras reformas.

En Buenos Aires, Morales y Kirchner acuerdan aumentar el precio del gas natural a $us 5,0 el millar de pies cúbicos.

Publicado en RedBolivia.

La Paz, Bolivia --

El precio del millar de pies cúbicos (mpc) de gas natural subirá de 3,20 a 5,0 dólares a partir del 15 de julio y hasta el 31 de diciembre según el acuerdo político que los presidentes Néstor Kirchner, Argentina y Evo Morales, Bolivia, suscribieron este jueves en el distrito de Hurlingham, Buenos Aires.

El incremento, que representa el 56,25 por ciento del precio que Argentina pagaba hasta ahora, fue anunciado en un acto masivo que tuvo lugar en ese distrito cuando se inauguraba un polideportivo y en el que participaron el Gobernador Felipe Sola además del intendente, Luis Acuña.

El acuerdo garantiza el suministro de gas natural de Argentina a Chile, como sucedió durante el Gobierno de Ricardo Lagos, lo que implica un mensaje para la presidenta Michelle Bachelet. Por otro lado, este resultado tiene alguna posibilidad de influir en Brasil, cuyo acuerdo con Bolivia aún está pendiente.

Morales saludó con un abrazo a Kirchner cuando ingresaba al Salón Blanco de la Casa de Gobierno. Ambos conversaron allí casi media hora para ultimar los detalles del acuerdo. Tras el protocolo entre ministros del gabinete y los funcionarios bolivianos, los presidentes brindaron una audiencia y luego volaron en helicóptero hacia Hurlingham.

Luego de un primer encuentro a solas, se sumaron a la reunión el jefe de Gabinete, Alberto Fernández; los ministros de Economía, Felisa Miceli; de Planificación, Julio De Vido; del Interior, Aníbal Fernández y el secretario de Relaciones Exteriores, Roberto García Moritan, en representación del canciller, Jorge Taiana, que se encuentra en Ginebra con el canciller, David Choquehuanca; los ministros de la Presidencia, Juan Ramón Quintana; de Planificación, Carlos Villegas, y de Hidrocarburos, Andrés Soliz Rada.

Después del acto en Hurlingham, Morales regresó de inmediato al país, para trasladarse a Cochabamba, donde cerrará la campaña de su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS), para la elección de la Asamblea Constituyente y el Referéndum Autonómico que se realizará el próximo domingo 2 de julio.

Kirchner y Morales también suscribieron un acuerdo de regularización migratoria que resolverá la situación de los ciudadanos bolivianos residentes en el vecino país y un convenio de integración e infraestructura para la construcción de un puente que unirá las ciudades fronterizas de Yacuiba, Bolivia y Salvador Mazza, Argentina.

Esta es la segunda visita de Morales a Argentina y se produce pocos días después de que Kirchner realizará una implacable defensa del proceso que atraviesan tanto el país como Venezuela, en medio de críticas a los Estados Unidos.

Entre otras cosas, en un discurso ante el Parlamento, recordó que Bolivia es el segundo país más pobre de América latina y que no debe quedar "desintegrado" del concierto internacional.

Argentina pagará en adelante $us 5 el millón de BTU de gas boliviano.

Publicado en Los Tiempos.

Este precio regirá hasta el 31 de diciembre. A partir de esa fecha se utilizará otra fórmula para fijar el precio

Buenos Aires Ap.- El presidente Evo Morales y su colega Néstor Kirchner, en un acto ante miles de personas en que se calificaron recíprocamente de "compañeros y amigos", firmaron ayer un nuevo acuerdo por el que la Argentina aceptó pagar más por el gas que importa de Bolivia.

La firma del nuevo convenio se realizó ante miles de residentes bolivianos y numerosos partidarios de Kirchner, en el municipio suburbano de Hurlingham, a unos 25 kilómetros al noroeste de esta capital.

Según el nuevo acuerdo, la Argentina pagará en adelante cinco dólares el millón de BTU (unidades térmicas británicas) en vez de los actuales 3,50 dólares, por los 7,7 millones de metros cúbicos de gas boliviano que importa diariamente.

El nuevo precio regirá a partir del 15 de julio próximo hasta el 31 de diciembre de 2006. A partir de esa fecha, se convino en utilizar una fórmula que relacionará el precio del gas, con el precio de los gases metano, butano y de las gasolinas naturales, explicó Andrés Soliz Rada, ministro boliviano de Hidrocarburos.

De esa forma, agregó Soliz Rada, el precio del gas se reajustará de manera permanente.

El Ministro informó también que en territorio boliviano, cerca de la frontera, se instalará una planta separadora de líquidos, financiada por la Argentina. Pero Bolivia tendrá la propiedad sobre los líquidos y su comercialización.

"El gas a ser exportado tendrá las mismas características que las registradas en las entregas actuales al sistema de transporte, en los puntos determinados en la frontera boliviano-argentina, hasta que se implemente la construcción de la planta de extracción de licuables del gas natural", agrega el convenio.

Morales

En su discurso, Morales dijo que "este acuerdo, logrado después de largas negociaciones, es un beneficio para mi país, un alivio económico. Es un beneficio para ambos países. Seguramente, ahora continuaremos negociando con otros gobiernos".

El mandatario visitante, que enfrenta en su país una elección clave el próximo domingo para designar la nueva Asamblea Constituyente, expresó su confianza en que ese organismo "garantizará la nacionalización de los hidrocarburos", ya dispuesta por su gobierno.

"Los recursos naturales, minerales, vegetales o forestales no pueden ser privatizados ni concesionados", dijo el Presidente boliviano.

"Quisiéramos seguir los pasos del compañero Kirchner", agregó, al referirse a la sostenida mejoría que se registra en el panorama económico y social de la Argentina.

Kirchner, que calificó a su visitante de "querido compañero y amigo", expresó a su vez que "este acuerdo significa también inversiones. Estamos dando el primer paso para construir el gasoducto del noroeste argentino y también para que pueda industrializarse el gas en Bolivia".

Agregó que el objetivo de su gobierno "es que podamos hacer junto al pueblo boliviano y a Evo, el gasoducto del sur, desde el Orinoco al Uruguay, que recorrerá toda Latinoamérica y servirá para equilibrar la ecuación energética en la región".

Kirchner agradeció "a la sufrida, trabajadora y abnegada población boliviana residente en la Argentina" y se comprometió a combatir los episodios de inhumana explotación de que han sido víctimas algunos bolivianos humildes en talleres textiles de éste país.

Morales llegó ayer temprano al frente de una comitiva integrada por seis ministros de su gabinete y por los presidentes del Senado y la Cámara de Diputados de su país, llegó en un avión militar argentino.

Desde el aeroparque metropolitano se dirigió a la Casa de Gobierno, donde lo aguardaba Kirchner para una reunión a puertas cerradas. Ambos mandatarios partieron luego en helicóptero hacia Hurlingham, en cuyo estadio polideportivo se efectuó la ceremonia de firma del acuerdo.

El nuevo precio pactado al cabo de meses de negociaciones entre Buenos Aires y La Paz regirá desde el próximo 15 de julio y hasta finales de año. Antes las partes deberán definir una fórmula para calcular el valor que será aplicado a partir de 2007, informaron fuentes oficiales.

El ministro de Hidrocarburos de Bolivia, Andrés Soliz Rada, dio a entender que este pacto afecta a Chile, al destacar que Argentina se comprometió "a no dar nuevas autorizaciones a empresas privadas para exportar gas boliviano" al mercado chileno.

Soliz Rada afirmó a los periodistas que Bolivia quiere venderle energía a Chile, pero remarcó que para el gobierno de Morales está vigente la "política de gas por mar", en alusión al antiguo reclamo de Bolivia a Chile por una salida soberana al océano Pacífico.

El convenio

EL ministro de hidrocarburos de Bolivia, Andrés Soliz Rada, explicó ayer cómo se fijará a partir del 31 de diciembre el precio del gas que su país exportará a la Argentina.

Pero a partir del año próximo, agregó el Ministro, se empleará para determinar el precio una fórmula que lo relacionará con los precios de los gases metano y butano y de las gasolinas naturales. El precio del gas se reajustará de manera permanente.

Soliz Rada agregó que el aspecto para él, fundamental del convenio firmado por los presidentes, será la instalación en territorio boliviano, cerca de la frontera con la Argentina, de una planta separadora de líquidos de gas seco y húmedo.

El Ministro dijo que su país tendrá la propiedad sobre esos líquidos y su comercialización. Agregó que la Argentina pretendía esa propiedad, pero que Bolivia logró un acuerdo ofreciéndole rebajar en 50 centavos de dólar el precio del millón de BTU, a cambio de conservar el control de la planta.

Bolivia cobra más a Argentina y fija el precio base del gas.

Publicado en La Razón.

Los presidentes de Bolivia y Argentina firmaron un convenio energético por 20 años. Fijaron el precio del gas en $us 5 hasta fin de año. Para el 2007 idearán una fórmula.

Bolivia se aseguró un nuevo mercado a largo plazo para el gas con Argentina y fijó un precio referencial del energético en la región, de cinco dólares por cada millón de unidades térmicas británicas (BTU). Es el precio más alto que se cobra en Sudamérica.

Los mandatarios de Bolivia, Evo Morales, y de Argentina, Néstor Kirchner, firmaron ayer un nuevo acuerdo en Buenos Aires, donde, además de modificar el precio, decidieron extender la relación energética entre ambos países por 20 años y ampliar los volúmenes de exportación del gas natural boliviano.

“Que el precio suba a cinco dólares es un beneficio y un alivio económico para mi país”, afirmó Morales ante unas 50.000 personas —entre bolivianos y argentinos— reunidas en un centro deportivo del municipio bonaerense de Hurlingham, donde se firmó el acuerdo.

Este convenio es el primer paso para la construcción del Gasoducto al Noreste Argentino (GNA) y para industrializar el gas en Bolivia, puntualizó Kirchner.

Hasta ahora, Argentina compraba el gas a un precio de $us 3,53 por millón de BTU. Entre el 15 de julio y el 31 de diciembre de este año pagará $us 5.

El incremento, de más del 50%, permitirá que los ingresos del Estado suban en $us 70 millones hasta fin de año, remarcó en La Paz el asesor de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Manuel Morales Olave.

Para el próximo año, el precio será fijado mediante una fórmula de ajuste que deberán elaborar representantes de ambos gobiernos en 30 días. Morales Olave explicó que la fórmula estará ligada a los precios del gas licuado de petróleo (GLP) y de la gasolina natural. Destacó que los $us 5 constituyen una importante referencia para la región, al margen de servir de parámetro para la negociación con Brasil.

Una fuente de la Cancillería argentina dijo que, en la práctica, el acuerdo representa "un piso al precio del gas en la región y uno de los más afectados es Brasil, porque no sólo le va a comprar más caro a Bolivia sino a Argentina".

El volumen de gas que se exporta a Argentina aumentará a 27,7 millones de metros cúbicos diarios (Mmmcd) cuando esté construido el GNA; de esta manera, Bolivia exportará 20 Mmmcd más. Entre tanto, la provisión continuará en 7,7 Mmmcd.

La futura exportación será de gas seco, sin licuables, para lo cual el Gobierno argentino dará un préstamo "concesional o preferencial" a Bolivia. Así, YPFB podrá instalar una planta de extracción de los componentes que permiten producir GLP.

El acuerdo contiene un compromiso de Argentina a destinar el gas boliviano a su demanda interna. Acepta que el energético "no podrá ser destinado a incrementar las autorizaciones de exportación de Argentina a terceros países sin el acuerdo de ambas partes", lo que puede afectar las ventas a Chile, Uruguay y Brasil. Buenos Aires, AFP, ANF y Redacción central

Argentina aceptó pagar más por el gas natural de Bolivia.

Publicado en Jornada.net

Buenos Aires, (EFE)
Argentina acordó ayer pagar 5 dólares por cada millón de BTU (unidad térmica británica) del gas natural que compra a Bolivia, lo que supone un alza de alrededor del 50 por ciento y un antecedente para la negociación que el país andino mantiene con Brasil.

El acuerdo, que también afecta a Chile, fue firmado por el Presidente argentino, Néstor Kirchner, y su homólogo boliviano, Evo Morales, en su primera visita oficial a Buenos Aires desde que asumió, el 22 de enero pasado.

"Que el precio del gas suba a 5 dólares es un beneficio para mi país, un alivio económico", destacó Morales durante un acto multitudinario al que asistió con Kirchner en la localidad de Hurlingham, a 20 kilómetros de Buenos Aires, donde se concentra la mayor cantidad de bolivianos radicados en este país.

El nuevo precio pactado al cabo de meses de negociaciones entre Buenos Aires y La Paz regirá desde el próximo 15 de julio y hasta finales de año. Antes las partes deberán definir una fórmula para calcular el valor que será aplicado a partir de 2007, informaron fuentes oficiales.

El Ministro de Hidrocarburos de Bolivia, Andrés Soliz Rada, dio a entender que este pacto afecta a Chile, al destacar que Argentina se comprometió "a no dar nuevas autorizaciones a empresas privadas para exportar gas boliviano" al mercado chileno.
Soliz Rada afirmó a los periodistas que Bolivia quiere venderle energía a Chile, pero remarcó que para el gobierno de Morales está vigente la "política de gas por mar", en alusión al antiguo reclamo de Bolivia a Chile por una salida soberana al océano Pacífico.

OTROS ACUERDOS
Néstor Kirchner y Evo Morales también acordaron construir una planta de separación de líquidos de gas natural en Bolivia, cerca de la frontera común, entre otros entendimientos.

En este sentido, el Ministro boliviano de Hidrocarburos apuntó que esa planta, "los líquidos y su comercialización" le pertenecerán a Bolivia, que a cambio "cedió un precio de 5 dólares y no de 5,50 dólares" por millón de BTU.

Morales nacionalizó el 1 de mayo último los yacimientos de hidrocarburos de Bolivia, controlados por petroleras extranjeras como la hispano-argentina Repsol-YPF y la brasileña Petrobras, y después planteó un aumento del precio del gas para Argentina y Brasil.

Desde 2004 y hasta ahora, Argentina importaba desde Bolivia un promedio diario de 5,5 millones de metros cúbicos de gas (5 por ciento de lo que consume el país) a 3,35 dólares por millón de BTU, cuando el precio internacional oscila entre 7 y 8 dólares por millón de la unidad de medición británica.

Este acuerdo es clave para Argentina, que planea comprar unos 27 millones de metros cúbicos diarios de gas boliviano una vez que concluya la construcción del Gasoducto del Nordeste, destinado a abastecer a siete provincias y que demandará una inversión de 1.000 millones de dólares.

"Consideramos que el gas boliviano no va a ir a Chile por lo menos en los próximos tres años, hasta que esté terminado el Gasoducto del Noreste, pero para ese entonces las necesidades de Argentina serán tan grandes que el gas boliviano tampoco va a ir a Chile", puntualizó Soliz Rada.

"Queremos venderle energía a Chile, pero termo-electricidad, que es lo que más necesita la minería chilena, y guardarnos el gas natural para la negociación marítima", añadió el ministro boliviano.

Kirchner destacó en el acto de ayer que este acuerdo es un "paso trascendente" para "garantizar la ecuación energética en la región" y "el primer paso hacia el gran Gasoducto Sudamericano", que irá desde Venezuela hasta Uruguay".

En tanto, el convenio de precios entre Argentina y Bolivia aparece como un precedente en las negociaciones que el país andino mantiene con Brasil, al que el Gobierno de Morales pretende cobrarle 7,5 dólares por millón de BTU, según Soliz Rada.

Brasil compra a Bolivia unos 26 millones de metros cúbicos diarios de gas a un valor cercano a los 4 dólares por millón de BTU, de un total de hasta 30 millones de metros cúbicos comprometido hasta el 2019.

junio 27, 2006

El gas boliviano lo importará Enarsa.

Publicado en La Nación.

El acuerdo se sellará pasado mañana cuando Morales visite el país; la Argentina lo pagará más caro

Pasará de 3,50 dólares por millón de BTU -unidad de medición- a 5,50 en 2007
El Banco de Desarrollo brasileño otorgó un préstamo de US$ 689 millones para financiar un gasoducto

El actual régimen de importación de gas desde Bolivia cambiará desde pasado mañana cuando los presidentes de la Argentina, Néstor Kirchner, y de Bolivia, Evo Morales, firmen un acuerdo de venta del fluido a un precio más caro que el que actualmente se abona. Sin embargo, las modificaciones no se limitarán sólo a un aumento del precio del combustible, sino que la rúbrica del acuerdo permitirá que la firma estatal Energía Argentina SA (Enarsa) ingrese en el mercado de la importación de gas.

Sucede que, según confirmaron fuentes que participan en la negociación, Enarsa será la que importe el gas boliviano para después venderlo en el mercado interno.

"El acuerdo es de Estado a Estado. Una empresa estatal boliviana, Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos [YPFB], le venderá a una empresa estatal argentina [Enarsa]", confirmó una fuente a LA NACION desde La Paz.

Respecto del precio que la Argentina abonaría, ayer hubo algunas precisiones de parte del gobierno de Bolivia. El embajador en Buenos Aires, Roger Ortiz Mercado, reveló que nuestro país pagará por el gas natural un precio de 5 dólares por millón de BTU -unidad de medición del gas- hasta fines de año, y a partir del próximo, el valor subiría a 5,5 dólares.

En el Gobierno no dan cifras del acuerdo. En una conferencia de prensa que se desarrolló en la Casa Rosada para anunciar diversos temas referidos a infraestructura energética, el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, se limitó a pronosticar que el acuerdo será "un éxito".

El funcionario sostuvo que "hay que esperar a la reunión de los presidentes", y destacó que "todas las variables están ajustadas como para que la reunión sea un éxito y pueda haber un acuerdo"."Esperemos hasta el jueves, pero mi visión es absolutamente optimista", sostuvo De Vido.

Ayer, entre los hombres del sector persistía el interrogante sobre cómo será el funcionamiento del mercado después del acuerdo. "Lo que se sabe es que ingresará Enarsa, lo que implica un jugador más en el mercado", se escuchó decir a un hombre del sector.

De Vido anticipó, además, que después del acuerdo con Bolivia habrá anuncios referidos al proyecto del Gasoducto del Noreste (GNEA).

La Argentina y Bolivia tienen vigente un convenio de compraventa de hasta 7,7 millones de metros cúbicos diarios a un precio que ronda los 3,40 dólares el millón de BTU, pero tras el acuerdo que se negocia actualmente nuestro país podría comprar hasta 20 millones de metros cúbicos diarios.

Gas subsidiado

"Enarsa va a tener que revender el gas en el mercado interno, es decir que va a tener una operación deficitaria. Actualmente se compra el gas a 3,40 dólares y se vende a 1,20 en el mercado interno", agregó un directivo privado.

Otro hombre ligado a la industria razonaba que el ingreso de Enarsa tiene que ver con una voluntad del Gobierno de subsidiar las tarifas. "Con los acuerdos de precios que están vigentes, las industria podrían aumentar sus precios si les suben los costos. En las industrias, el aumento del gas podría justificar un retoque de los precios. Por eso se pone a Enarsa en el medio, para poder subsidiar los precios del gas", sostuvo. "No es bueno que se utilice a Enarsa para canalizar fondos públicos, en vez de mantener un rol empresarial", agregó.

Se confirmó también que el Banco Nacional de Desarrollo de Brasil (Bndes) aprobó un préstamo por US$ 689 millones para financiar las ampliaciones de transporte del sistema de gasoductos troncales que operan las transportadoras de gas TGN y TGS.

De Vido viajó ayer a Caracas para participar hoy de la primera reunión para la construcción del Gasoducto del Sur, que uniría Venezuela con Brasil, Bolivia y la Argentina. "Por primera vez habrá una reunión de cuatro", subrayó De Vido. El ministro comentó que ya se había reunido con el ministro de Industria, Energía y Minería de Uruguay, Jorge Lepra, para invitarlo a que su país participe. "Seguramente haremos mañana una invitación para que Uruguay se integre", informó De Vido.

junio 26, 2006

Árbitro internacional vería caso del precio gas a Brasil.

Publicado en El Mundo.

En caso de que Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y Petrobras no logren un acuerdo en 45 días sobre el precio del gas natural que se vende a Brasil, el asunto será dirimido por un árbitro internacional pero no por un tribunal internacional, explicó el superintendente de Hidrocarburos Víctor Hugo Saenz.

"No se trata de un tribunal internacional como informan los medios de comunicación. Hay que aclarar esto. Será un árbitro que tomará en cuenta las ofertas de ambas partes y fijará un precio promedio. Tal proceso no demoraría más de 15 días", explicó.

Según las cláusulas del contrato suscrito en 1996,YPFB envió la respectiva notificación fehaciente a Petrobras la semana pasada. La compañía brasileña remitió la respuesta solicitando el inició de negociaciones para el pasado miércoles. Yacimientos propuso su postergación por unos días.

"Las negociaciones empezarán entre el 26 y 27 de este mes", dijo el superintendente. Durante las últimas semanas, los ejecutivos de Petrobras rechazaron cualquier incremento del precio del gas natural al margen de lo establecido en el contrato.

Declaraciones duras en ese sentido se escucharon en los medios de comunicación. "Yo creo que, de alguna manera, los brasileños están resentidos por algunas acusaciones de contrabando y evasión que se hizo en Bolivia. Pero ellos a nivel personal expresaron su predisposición para negociar los precios. Se trata de negocios y no hay otra alternativa que negociar", dijo.

Brasil está pagando 3,50 dólares por el millar de pies cúbicos de gas natural. Las autoridades bolivianas opinaron que ese precio es muy bajo respecto a los precios internacionales. El Ministro de Hidrocarburos Andrés Soliz Rada opinó que las tarifas deberían oscilar entre los siete y nueve dólares por millar de pies cúbicos. Los brasileños no quieren pagar más de 4,4 dólares.

Saenz explicó que los precios internacionales varían según las épocas del año que son distintas en el hemisferio norte y sur. Cuando hay invierno en Estados Unidos y Europa en el sur se vive el verano. "En las épocas frías en los países desarrollados el precio del gas llega incluso a 13 dólares el millar puestos en puerta de ciudad", dijo.

Argentina y Bolivia ya acordaron alza precio de gas: diplomático.

Publicado en Reuters.

BUENOS AIRES, jun 26 (Reuters) - Argentina firmará el jueves con Bolivia un acuerdo sobre el gas natural que importa desde el país andino, que incluye una subida del precio cercano al 47 por ciento y un fuerte aumento del volumen, dijo el lunes una fuente diplomática.

Ambos países negociaron a lo largo de meses para poder llegar al convenio que formalizarán en Buenos Aires el presidente argentino, Néstor Kirchner, y su par boliviano, Evo Morales.

"Ya está todo acordado. Lo firman el 29 (de junio) el presidente Kirchner y el presidente Evo Morales. Los valores son de 5 dólares por millón de BTU (unidades térmicas británicas)", dijo a Reuters el embajador de Bolivia, Roger Ortiz Mercado, en una conversación telefónica.

Hasta el momento, Argentina paga 3,4 dólares por millón de BTU.

El programa de largo aliento también fija un incremento de las exportaciones de gas boliviano a Argentina hasta llegar a 20 millones de metros cúbicos diarios, dijo el diplomático.

Argentina importa actualmente unos 5,5 millones de metros cúbicos por día, algo más de un 4 por ciento del total del cosumo en el país, y por debajo del máximo de 7,7 millones que está habilitado a comprar hasta diciembre de este año.

Morales, que preside el país más pobre de Sudamérica, nacionalizó en mayo los hidrocarburos y luego planteó un aumento del precio del gas que vende su país mayormente a Brasil y Argentina.

El acuerdo que firmarán Kirchner y Morales tiene un capítulo dedicado a inversiones que se harán mediante alianzas estatales binacionales.

"Vamos a emprender proyectos comunes. Necesitamos plantas de separación de líquidos, plantas termoeléctricas. Son proyectos que se van a concretar porque los necesitamos", dijo Ortiz Mercado.

Argentina planea construir por su parte un gasoducto que proveerá de gas al noreste argentino.

El precio de venta de gas a Argentina aún no está cerrado.

Publicado en LaRazón.

Se prevé que Argentina pague entre 50 y 60% más. En Buenos Aires, los presidentes de ambos países también firmarán acuerdos en materia de caminos, coca y migración.

El presidente Evo Morales afina detalles para viajar a Buenos Aires, donde el jueves definirá con su homólogo argentino, Néstor Kirchner, el nuevo acuerdo de exportación de gas. También se anuncia la firma de una declaración conjunta, pero, por su valor económico, el aumento del precio del energético —que rondará entre 50 y 60 por ciento respecto del actual— se roba la importancia del pacto binacional.

´El viaje es fundamentalmente para firmar el contrato sobre el gas, pero los presidentes también suscribirán una declaración conjunta, en la que expresarán la necesidad de consolidar las relaciones, fortalecer las democracias y regularizar la migración entre ambos países´, adelantó anoche el canciller David Choquehuanca, quien destacó un acuerdo, el de la construcción del puente Salvador Mazza-Yacuiba, que en un principio iba a ser financiado por ambos gobiernos, pero ahora sólo lo hará Argentina.

También acordarán el voto de los ciudadanos fuera de sus países para futuras elecciones y, además, hablarán del tema de la coca.

El tema del precio se maneja como un secreto de Estado, aunque el vicepresidente Álvaro García Linera ya adelantó que subiría en 50 ó 60%, es decir, de $us 3,35 dólares por millón de unidades térmicas británicas a cerca de $us 5. “Se tiene que confirmar allá, las comisiones siguen trabajando”, manifestó el Canciller.

El asesor de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Manuel Morales Olivera, afirmó que el acuerdo incluye un mayor volumen de exportación y también inversiones. La relación contractual con Argentina se extendería por 20 años más, añadió.

Los acuerdos se suscribirán en la localidad bonaerense de Hurlingham, ante unos 15 mil residentes bolivianos y 20 mil argentinos. Antes, habrá una reunión ampliada entre los ministros para afinar detalles del acuerdo energético.

Los dos se saldrán con la suya

Los dos mandatarios, Evo Morales y Néstor Kirchner, se saldrán con la suya. Por un lado, Morales reclama desde el comienzo de su gestión un incremento al precio del gas que Bolivia le vende a Argentina. Por el otro, Kirchner se anotará una victoria al lograr la ampliación del contrato por el que su país recibirá más energético durante, posiblemente, 20 años más.

Tanto un gobernante como el otro cumplirá, así, con las promesas que hicieron en sus países respecto del tema del gas.

Mientras Morales le exige a Argentina que pague más por el gas natural, de tal manera de lograr una mayor recaudación por la venta, Kirchner busca ampliar la compra a partir de la construcción de un gasoducto que nacería en el sur boliviano y desembocaría en el nordeste argentino.

Por ahora, Argentina abona $us 3,35 por cada millón de unidades térmicas británicas y, según las previsiones, ahora podría recibir alrededor de $us 5.

Chile expectante ante acuerdo sobre el gas entre Argentina y Bolivia.

Publicado en La Nación.

La posibilidad de que se normalicen los envíos de gas argentino hacia Chile, pero con un importante aumento del valor, son algunas de las eventuales consecuencias a las que debe estar atento el país ante el acuerdo alcanzado entre los presidentes Néstor Kirchner y Evo Morales sobre el precio del combustible.

La prensa argentina confirmó que el Gobierno de Néstor Kirchner habría cerrado un acuerdo con Bolivia para comprarle gas a 5 dólares el millón de BTU, un arreglo que sería formalizado el próximo jueves en Buenos Aires por el mandatario trasandino y el Presidente Evo Morales.

En la actualidad, Argentina importa desde Bolivia un promedio diario de 5 millones de metros cúbicos, a un precio de 3,20 dólares por millón de BTU. De acuerdo con el periódico argentino “Clarín”, el flujo creciente de combustible proveniente del país altiplánico para abastecer el mercado interno trasandino fue fundamental para destrabar la negociación, “ya que por un lado la Argentina se asegura más cantidad de gas, y por el otro Bolivia tiene un mercado cautivo al lado de su frontera”.

Pese a que Gobierno de Kirchner se comprometió a no triangular gas boliviano hacia el mercado local, no se descarta que los trasandinos aumenten las ventas a nuestro país, ya que el precio que paga Chile por el gas es tres veces más caro del valor convenido con Bolivia.

De esta forma, Chile espera expectante lo que suceda con las importaciones trasandinas. En las próximas semanas se deberá determinar si continuarán los recortes del hidrocarburo, además de analizar la forma de contrarrestar los eventuales incrementos en el precio del gas que aplicará la autoridad argentina para compensar los mayores valores pactados con Bolivia.

Según Clarín, “varias empresas han prometido que si el Gobierno sube el precio del gas local, en poco tiempo, Argentina puede volver el autoabastecimiento, porque llegarán las inversiones necesarias para incrementar la producción”.

Gasoducto del Sur

En tanto, los equipos técnicos de Argentina, Bolivia, Brasil y Venezuela comenzaron a preparar la agenda y los documentos para la cumbre de ministros que estudiará el proyecto energético denominado “Gasoducto del Sur”, que se celebrará mañana en Caracas.

Se espera que los personeros oficiales sigan adelante con las discusiones sobre la ingeniería, tecnología, financiación, impacto ambiental y social, tarifas y aspectos legales del proyecto.

Según un vocero del Gobierno de Hugo Chávez, el encuentro multilateral de los representantes sudamericanos “busca coordinar las acciones pertinentes para revisar la estructura del trabajo, informar sobre los avances alcanzados, evaluar los efectos que genera la incorporación de Bolivia al proyecto e identificar el mecanismo más idóneo para formalizar su ingreso”. La autoridad venezolana agregó que se elaborarán las estrategias para que su cumpla la fecha prevista del lanzamiento del proyectos, programado para agosto.

A la cumbre martes asistirán el ministro argentino de Planificación, Julio de Vido; el brasileño de Minas y Energía, Silas Rondeau; el boliviano de Hidrocarburos, Andrés Solís; y el venezolano de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez.

El Gran Gasoducto del Sur prevé unir a Caracas con Buenos Aires, pasando por Brasil, en un recorrido de más de 6 mil kilómetros, y distribuir unos 150 millones de pies cúbicos del combustible a siete países sudamericanos. Su costo total fue estimado en unos 23 mil millones de dólares y su construcción demandaría no menos de 6 ó 7 años. LN