mayo 12, 2006

Declaraciones de Evo provocan reacciones en Brasil y España.

Publicado en Los Tiempos.

Agencias.- La empresa estatal brasileña Petrobras se declaró ayer indignada por las declaraciones del presidente Evo Morales, quien sugirió en Viena que el conglomerado petrolero había violado las normas legales de su país.

En España, tampoco se dejaron esperar las reacciones, a las críticas efectuadas por Morales contra el Gobierno español, a José Luis Rodríguez Zapatero, por no haber cumplido las promesas de cooperación que le hizo a favor de Bolivia.

Ante el malestar que provocó Morales en los aludidos, ayer, en Bolivia las autoridades gubernamentales salieron al frente para minimizar lo sucedido y tratar de rectificar las palabras del mandatario. El ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, anunció próximos acuerdos con España en materia de seguridad y defensa. "Acá no hay ningún tipo de resentimientos (...) creemos que estamos en un momento importante para fortalecer las relaciones" con España, dijo.

Con relaciones a la alusión a Petrobras, manifestó que Morales en ningún momento hizo una relación directa de "prácticas no legales" de Petrobras; por el contrario se refirió a la ilegalidad de los contratos petroleros porque no fueron ratificados en el Congreso Nacional.

"La alusión que se ha hecho en el ámbito de hidrocarburos es una alusión vinculada a la forma cómo los contratos fueron ejecutados por las empresas petroleras y el Gobierno ha reconocido, y no solamente nuestro gobierno, sino el propio Parlamento que estos contratos se tornaron ilegales en la medida en que no fueron aprobados por el Parlamento nacional", dijo.

Quintana precisó que esta situación -mal entendido- no representa "ningún retroceso" en el proceso de conversaciones iniciadas la noche del pasado miércoles con el fin de concertar nuevos contratos petroleros con Petrobras.

Comunicado

"Petrobras manifiesta su indignación frente a las acusaciones de que la compañía pueda haber operado, en cualquier momento, deliberadamente al margen de la ley, sea en Bolivia o donde quiera que actúe", declaró en un comunicado difundido anoche.

La declaración de la empresa agregó combustible a la disputa boliviano-brasileña que prendió fuego a partir de la nacionalización de los yacimientos gasíferos por parte del gobierno de Morales.

En una conferencia de prensa en Viena, donde se encuentra junto con otros jefes de Estado para asistir a la Cumbre Unión Europea-América Latina, Morales declaró inválidos decenas de contratos petroleros negociados secretamente con empresas extranjeras que operan en Bolivia.

"Los más de 70 contratos que tenemos hasta ahora... todos son inconstitucionales. Fueron negociados secretamente. El pueblo boliviano no supo nada", dijo, para agregar que algunas firmas no respetaban las leyes bolivianas y habían traicionado a su país.

Citó a Petrobras, el inversionista principal de Bolivia. "Yo respeto a los bancos brasileños, a los bancos españoles y a los productores de soya si ellos respetan nuestras leyes", dijo Morales. "Pero algunas empresas brasileñas operan ilegalmente en nuestro territorio", agregó.

Petrobras, dijo, "se siente sorprendida por las noticias recientes que relatan acusaciones de ilegalidad de su actuación en Bolivia, transmitidas inmediatamente después de la emisión de una declaración conjunta que detallaba los puntos acordados la noche anterior en La Paz".

Dijo que por esa razón quería aclarar que siempre actuó "estrictamente dentro de la ley, en Bolivia y en todos los países en los que opera y operó".

Sublineó que su presencia en Bolivia resultaba de "acuerdos bilaterales entre los gobiernos de Brasil y de aquel país que habían hecho posible la construcción del gasoducto Bolivia-Brasil y la exploración de los campos de San Alberto y San Antonio en asociación con YPFB, la empresa estatal boliviana.

"Esa asociación fue deshecha con la privatización de la parcela de YPFB en esa sociedad", dijo el comunicado.

Aclaró que fue un función de los acuerdos binacionales que Petrobras "financió y construyó el segmento boliviano del gasoducto Bolivia-Brasil, realizó inversiones en exploración (inicialmente en sociedad con YPFB) y en producción en San Alberto y San Antonio. Como resultado de esas operaciones, la compañía (Petrobras) compra gas boliviano desde 1999, genera empleos y paga impuestos en Bolivia, siendo responsable del 25 por ciento de los ingresos tributarios de ese país".

España ratifica su ayuda

El Ministerio de Exteriores aseguró ayer que España mantiene sus compromisos de ayuda al desarrollo y condonación de deuda con Bolivia, pero subrayó que se trata de procesos "complicados de articular" y que no se pueden hacer efectivos "en dos días".

Fuentes de Exteriores respondieron así al presidente de Bolivia, Evo Morales, quien afirmó ayer en Viena que el Gobierno español no ha cumplido su compromiso de doblar la ayuda a su país ni de condonar la deuda, y expresó su esperanza de que los compromisos de España no se vean afectados por su nacionalización de los hidrocarburos.

El Gobierno español afirmó por su parte que desea mantener unas buenas relaciones con Bolivia, dentro de la defensa y salvaguarda de los intereses respectivos.

Las fuentes del Ministerio encabezado por Miguel Ángel Moratinos, quien se encuentra ya en Viena participando en reuniones previas a la IV Cumbre UE-América Latina y Caribe, destacaron el compromiso de España de doblar la cooperación a todos los países latinoamericanos que lo necesiten, entre ellos Bolivia.

Al respecto precisaron que la ayuda a este país se habría duplicado con independencia de que Morales ganara o no las pasadas elecciones presidenciales.

Por ello, reiteraron ese compromiso y el de condonar la deuda externa boliviana, pero subrayaron que este proceso es un "mecanismo complejo" que implica a varios ministerios y "lleva su tiempo articularlo".

ENCUENTRO

Mientras el ministro de la Presidencia, Ramón Quintana, cubría con paños fríos el clima de opinión que desató Morales en Austria, donde participa de la Cuarta Cumbre Unión Europea - América Latina y el Caribe, se aguarda que hoy un encuentro formal con el mandatario español.

La cita servirá para concretar diversos espacios de la cooperación y asistencia, además, de los efectos de la nacionalización de los hidrocarburos.

Fuentes diplomáticas bolivianas indicaron que "independientemente de la situación de la Repsol", España podría incrementar la cooperación a favor de Bolivia en unos 60 millones de euros, en el marco de los fondos de ayuda al desarrollo, al tiempo que espera que se concluya el trámite para la condonación de la deuda bilateral, merced a un compromiso para erradicar el analfabetismo.

"No he visto nada (de ayuda); tampoco veo la condonación", declaró en Viena el Jefe de Estado a los periodistas, al decir que espera que la ayuda de España no se vea reducida por efecto de la nacionalización de los hidrocarburos.